¿Cuántas veces hemos terminado de pintar una pared o una habitación y no sabíamos qué hacer con la pintura que había sobrado?

¿Cuántas veces hemos ido a retocar esa pared, al cabo de unos meses, y no sabíamos si esa pintura podíamos usarla o en cambio tendríamos que comprar otra?

Hoy en nuestro blog daremos respuesta a todas esas preguntas.

Primero si no ha sobrado mucha pintura podemos ponerlo en un bote pequeño. En el caso contrario, si queremos guardar los botes de pintura en casa, y no queremos que se estropeen tendremos que limpiar bien los bordes de la tapa. De esa manera no dejaremos restos y así no se quedará pegada, imposibilitando su apertura. Debemos hacerlo a conciencia y dejarlo limpio. Una vez hecho eso pasamos al segundo paso, cerrar bien el bote.

Parece un paso evidente, pero si no lo hacemos entrará aire en la pintura y se estropeará antes.

Por lo tanto es muy importante cerrar bien el recipiente, y para ello usaremos un martillo. Ten cuidado porque depende la fuerza que apliques puedes deformar la tapa. Una vez lo hemos comprobado, la guardamos bocabajo. No añadas agua o diluyente porque puedes perjudicar las propiedades de esta.

Debe colocar en un sitio con unas temperaturas óptimas para que el contenido no se estropeé.Un lugar idóneo sería un espacio donde no le dé mucho el sol, para que no se caliente la pintura y tengamos que tirarla.Con estos pasos tan sencillos conseguiremos que la pintura se mantenga perfecta para poder hacer un segundo uso de ella.

Una vez hecho esto, pasan las semanas o los meses, y esa pared que habíamos pintado necita un retoque, ese es el momento donde nos acordamos de la pintura que guardamos.

Aquí es cuando llega la segunda pregunta, que hemos realizado al comienzo del post: ¿Puedo utilizar esa pintura guardada o ya ha caducado?

 Todos los botes de pintura tienen una fecha de caducidad, una vez ha pasado esa fecha es cuando pierde propiedades y es mejor comprar otra.Por lo tanto, antes de pintar debemos mirarla. En el caso de que la fecha de prescripción no haya pasado, y la pintura esté bien guardada tenemos que comprobar el estado de esta.

Antes de aplicarla debemos agitar bien el contenido y colar la pintura.Para ello la aplicaremos en un trozo de la pared poco visible, o donde podamos taparlo si finalmente vemos que la pintura estaba en mal estado.Si notamos que está más líquida de lo normal, y no tiene consistencia debemos tirarla. En el caso de que se adhiera bien a la superficie hay que comprobar el tiempo que tarda en secarse, si tarda más de lo normal, debemos tirarla.

Desde PYMA te damos estos pequeños consejos, pero ante la duda te recomendamos comprar otro bote de pintura, ya que al aplicarlo podemos estropear la pared.También aconsejamos leer las instrucciones del fabricante o la ficha técnica.

La última palabra antes de usar una pintura, ya abierta la tiene el consumidor, pero con esta información sabrás como mantener en buen estado la pintura que compra.